Memoria histórica. OPINION DEL LECTOR

Francisco Pérez Alex - Sevilla

EL PAÍS | Andalucía - 23-01-2004

Después de 25 años de Democracia, todavía hay sectores sociales que presionan para que no se hable de las víctimas de la represión de la dictadura franquista y no se de a conocer la versión de los vencidos en el golpe militar, la guerra civil y la dictadura. Pero las jóvenes generaciones, los nietos de aquellos españoles, han empezado a hacerse preguntas, y ya no se conforman con silencios, respuestas evasivas o con la sola versión de los vencedores..

Cada vez es más difícil ocultar, por más que historiadores franquistas o afines lo sigan intentado, que en donde el golpe de estado militar triunfó desde el primer momento, y más en Andalucía con Queipo de Llano, (todavía enterrado en la Basílica de la Macarena de Sevilla), la represión que le siguió inmediatamente, obedeció a un plan de exterminio y terror, a un genocidio cuidadosamente preparado, apoyados desde el primer momento por la Italia fascista y la Alemania nazi, con la complicidad de una base social conservadora y la Iglesia Católica,

Estos hechos están saliendo a la luz de una exhaustiva investigación en archivos y documentos militares, realizada por una generación de jóvenes historiadores de reconocida solvencia y rigor, entre los que destacan los andaluces Francisco Espinosa, Francisco Moreno, Fernando Romero y Juan Ortiz, con libros como: La columna de la muerte; La resistencia armada contra Franco; Jornaleros y organizaciones campesinas en Cádiz ; o La Sevilla de 1936, del golpe a la guerra civil, entre otros muchos. Desde aquí mi reconocimiento al trabajo de estos historiadores andaluces.